Tres maneras de acercar el arte a los niños

acercar el arte a los niños

¿Estamos de acuerdo? Cuanto antes se familiarice un niño con el arte, mejor. Sus visitas a museos y galerías, ya sea con la escuela o en familia, deberían empezar temprano. Además, la experiencia tiene que resultarle atractiva si queremos que conecte realmente con el arte y no lo vea como algo aburrido, complicado y lejano.

Buscando información sobre el tema, he creído identificar tres vías a través de las cuales galerías y museos intentan acercar el arte a los más pequeños. Estarían determinadas por el rol que se da al niño en su relación con la obra: espectador, propietario o creador. Veamos esas vías y un par de ejemplos de cada una.

 

1. El niño como espectador

Los centros suelen ofrecer actividades exclusivas para los más pequeños que les presentan el arte de manera divertida. El objetivo es lograr que lo conozcan, lo comprendan y, sobre todo, lo disfruten.

Galería de Arte de Nueva Gales del Sur
Esta galería australiana sugiere varios juegos para que los niños exploren el arte a través de los sentidos y de la imaginación. Algunas de sus originales propuestas: inventarse el diálogo que mantienen los protagonistas de una obra, posar como ellos, intuir lo que sucedió antes o después de ser pintada la escena, describir los olores o sonidos que les rodearían si estuviesen en el cuadro o imaginar a qué sabría si se lo pudieran comer.

Museo de Arte Contemporáneo de Tokio
El pasado verano dedicó a los más pequeños una exposición titulada “Fantasmas, calzoncillos y estrellas”. Dejando a un lado las normas típicas de un museo (no correr, no tocar, no armar jaleo), invitaba a los niños a disfrutar del arte a su manera. Formaba parte de la exposición una Casa Encantada en la que una sala de retratos convencional acababa transformándose en un lugar mágico: los niños incluso podían meterse literalmente dentro de las obras.

 

2. El niño como propietario

Algunas galerías animan a las criaturas a ir un paso más allá que el de ser meros espectadores. Poseer una obra, aunque pueda estar planteado como un juego, permite que adquieran un compromiso continuado con el arte.

Plom Gallery
Abrió puertas en Barcelona hace apenas unos días y ya ha despertado un gran interés. Esta galería de arte contemporáneo dedicada a los más pequeños apuesta por el rol pedagógico del arte y confía en su poder para estimular la creatividad y la autoestima del niño. Los pequeños que adquieren una obra de la galería se llevan también un certificado de autenticidad que les acredita como propietarios, con lo que se pretende crear un vínculo emocional entre ambos.

Kindergallery
A caballo entre Berlín y la localidad australiana de Leura, esta galería se vale de internet para vender sus obras de arte a criaturas de todo el mundo. Las define como piezas únicas, de calidad y con encanto. Los responsables de la galería creen que el arte no sólo debe inspirar a los niños, sino que también debe crecer con ellos, acompañarles en su vida cotidiana.

 

3. El niño como artista

¿Qué mejor manera de acercarse al arte que experimentarlo en persona? Muchos museos y galerías ponen a disposición de los más pequeños talleres o aplicaciones online para que den rienda suelta a su creatividad.

Galería de Arte Nacional de Estados Unidos
En su web ofrece una completísima zona interactiva en las que las criaturas se convierten en artistas virtuales. Allí pueden explorar su vena creativa a la vez que aprenden historia del arte y se familiarizan con los autores y estilos que acoge la galería. Los niños disponen de numerosas herramientas para, por ejemplo, crear collages, componer bodegones, diseñar esculturas móviles o pintar libremente.

Galería de Arte para Niños en Praga
Los responsables de este centro están convencidos de que el acercamiento al arte por parte de los más pequeños es más completo si combinan la percepción visual con la experiencia táctil. Por eso les permiten que toquen las obras de arte e incluso que las alteren. Así, mientras juegan, los niños descubren varias técnicas creativas y materiales.


Foto: Alexander Grey